Arboretum

El mazo tiene 80 cartas de diez colores diferentes, cada uno con una especie distinta de árbol; cada color tiene cartas numeradas del 1 al 8, y el número de colores utilizados depende del número de jugadores. Los jugadores empiezan con una mano de siete cartas. En cada turno, un jugador roba dos cartas (del mazo o de una o más de las pilas de descarte), pone una carta sobre la mesa como parte de su arboreto y luego descarta una carta en su pila de descarte personal.

Cuando se agota el mazo, los jugadores comparan las cartas que quedan en sus manos para determinar quién puede puntuar cada color. Para cada color, la(s) jugadora(s) con el valor más alto de cartas de ese color en la mano puntúa(n) un camino de árboles en su arboreto que empiece y termine con ese color; un camino es una cadena ortogonalmente adyacente de cartas con valores crecientes. Por cada carta de un camino que puntúe, el jugador gana un punto; si el camino está formado únicamente por árboles del color que puntúa, el jugador gana dos puntos por carta. Si un jugador no tiene el mayor valor para un color, obtiene cero puntos por un camino que empiece y termine con ese color. Gana quien tenga más puntos.